__________ A SOLAS CON LA OBRA __________
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STEEL BEAUTY
A veces, sólo a veces llega esta sombra, cayendo la tarde o empezando el alba; y me despierto, me despierto al mordisco azul en el corazón. A veces, sólo a veces llega esta sombra, lápida indescifrable que escondo bajo el pericardio del alma, pero asoma… Asoma tras mi pelo y mi sonrisa envejecida, asoma tras mis labios peligrosos, la arrastro y se hace estela metálica de mis sueños, de mis arquitecturas más osadas. El corazón flotante de la madre muerta, que asciende, asciende..., aun sujeto a las cuerdas de mi alma.
Dentro de mí palpitas, soy tu piel, soy tu dulce suavidad más diminuta, tu último hijo. Es una asfixia metálica la que siento, el dolor esculpe edificios de acero mientras las máquinas oxigenan tu corazón. No te veo. No estás. No te siento. Quiero olerte y sólo hierve el acero del dolor. En aquel cuarto, en el cuarto más lejano, me acuné contra tu cuerpo. Levemente. Tu dolor insondable llenando tu corazón flotante de edificios asesinos. Te miraba: ¿Cuándo será? ¿Cuándo se irá? ¿Hasta cuándo su mano suave y su caricia? La belleza del acero. La belleza de la muerte.
Dentro de mí palpitas, soy tu piel, soy tu dulce suavidad más diminuta, tu último hijo. Es una asfixia metálica la que siento, el dolor esculpe edificios de acero mientras las máquinas oxigenan tu corazón. No te veo. No estás. No te siento. Quiero olerte y sólo hierve el acero del dolor. En aquel cuarto, en el cuarto más lejano, me acuné contra tu cuerpo. Levemente. Tu dolor insondable llenando tu corazón flotante de edificios asesinos. Te miraba: ¿Cuándo será? ¿Cuándo se irá? ¿Hasta cuándo su mano suave y su caricia? La belleza del acero. La belleza de la muerte.
Idoia Arbillaga
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| ARTIFICIAL 2010 |