CATASTRÓFICA REALIDAD
 
VISCERATUR MAGNOLIA   

IV
«Oscilante movimiento el puñal
al puño   palabra de filo mortal en la vena falla que se abre voraz   Anemia de los náufragos - acento parisino- el coronel dejó propina   aun la peonza gira y gira    U que dobla sobre la T casi la erosión del falo    acero que busca de cuajo sacarte las entrañas   dar de comer a los cuervos   Vaivén del mudo  taxista  ebrio en la esquina junto al hipódromo  ballestas saetean al mulato hijo del indocumentado    pirao que vendía farlopa a los regatistas     Honra el resbalón y en zigzag gana el foso de arena la atleta jubilada   País que ya no existe otro dictador cambio la contraseña del candado     La sierra minera  no llegarán las transferencias   Cenaremos en casa con la tele -llagas en las ventanas que no cierran- puesta y así no tendremos que hablar de los nigerianos atrapados entre las mareas   Noventa y siete ahogados     Péndulo sobre la frontera    temblor de esa cuerda que pudo estar al cuello   nadie viaja gratis   Hace frío en tu escalera ya no duerme el rumano   gotea el puñal la vejiga está a punto de reventar    Hay pan duro de ayer y algo de mermelada    Para qué más de una comida   no hemos resuelto aun como escapar de los zulos de los CIEs de las comisarías de los negreros de las balsas de los especuladores de los medios de comunicación de los racistas de las bandas organizadas del sermón de los pijos de la bata blanca de las cunetas de los sótanos     Curvada vuelta y vuelta cae la fruta pocha      Las hojas la tapan   cuando el viento revuelve la tarde sin ángeles ni cipreses      Vamos pisando por el camino asfaltado sin mirar a las cunetas     Sin mirar                                  Sin miramientos.»